LA RUTA MOCHE : TRUJILLO Y CHICLAYO
La costa norte del Perú es un territorio privilegiado. Es reconocida la calidad de sus comidas, la calidez de su gente y la riqueza de su patrimonio arqueológico, en algunos casos expuesto en magníficos museos.
Una de las principales civilizaciones antiguas del Perú, los Moche, gobernados por sacerdotes guerreros y cuyo territorio abarcó casi la mitad de la costa del Perú entre los inicios de la Era Cristiana hasta el siglo XVIII, tuvieron sus centros entre las actuales ciudades de Trujillo y Chiclayo. Esta sociedad adquirió un altísimo desarrollo en el arte destacando su cerámica escultórica donde retratan no solo a sus divinidades sino también las más diversas escenas de su vida cotidiana. Hoy en día el visitante podrá disfrutar desentrañando los misterios de esta civilización recorriendo la especial arquitectura de sus “huacas” (centros ceremoniales) admirado los hermosos murales policromos hallados en ellas así como la belleza de las piezas de oro encontradas en diversas tumbas, entre ellas la del Señor Sipan.
Pero no todo es Moche en el norte del Perú y es así como encontraremos vestigios de otras importantes civilizaciones: los Lambayeque y los Chimu quienes construyeron la ciudad de adobe más grande del mundo: Chan Chan.
Junto a estos importantes vestigios arqueológicos encontramos casonas coloniales, hermosos paisajes, tierras de cultivo, pintorescas playas y una cultura viva con una identidad muy propia que permitirán a cualquier viajero tener una experiencia memorable.
Imprescindibles
Museo Tumbas Reales de Sipan: En 1987 un pequeño equipo de arqueólogos peruanos liderados por el Dr. Walter Alva encontró en el lugar denominado Huaca Rajada, la tumba de un importante gobernante mochica: El Señor de Sipan.
Dentro de la cultura Mochica, el Señor de Sipán fue considerado un semi-dios: fue sepultado tras complejos rituales y sacrificios, acompañado de ocho personas. Para albergar tan importante hallazgo se ha construido un magnifico museo que hace también las veces de mausoleo ya que alberga los restos del Señor de Sipan. Su arquitectura rescata la tradición arquitectónica Moche. Este museo es considerado entre los más importantes de América y se le conoce como “El Museo del Siglo XXI”.
Huaca del Sol y de la Luna: Estas dos “huacas” o templos forman parte de un mismo complejo que durante algún tiempo fue capital de la cultura Mochica. La Huaca del Sol, posible sede administrativa tiene aproximadamente 20m de altura puede ser vista más no se puede explorar su interior. La Huaca de la Luna está compuesta por templos superpuestos de acuerdo a distintas etapas del poderío mochica. En algunas paredes se pueden observar hermosos murales policromos cuyas figuras claramente definidas, permiten observar la imagen del dios Aia Apaec. En el templo, los arqueólogos han descubierto una tumba con más de 40 guerreros.
Tucume: Se remonta al 700 años d.C. y según la leyenda, fue fundado por Collac, descendiente de Naylamp héroe mítico de la cultura Lambayeque. Túcume o el Valle de las Pirámides, consta de 26 pirámides de adobe o “huacas” de casi 40m de altura. Las estructuras datan de diferentes periodos y denotan que tuvieron funciones políticas, administrativas, sociales y religiosas. Curanderos y chamanes locales llegan hasta aquí para realizar sus ceremonias religiosas ya que aseguran que estas tienen poderes especiales.
Chan Chan: Este centro urbano prehispánico representa la más grande ciudad de barro de América prehispánica. Fue declarada Patrimonio Cultural de la Humanidad por la UNESCO en 1986. Chan Chan habría sido la capital del reino Chimú, abarcando originalmente más de 20 km2. Los arqueólogos estiman que albergó a más de 100 mil personas. En su estructura se distinguen plazas, viviendas, depósitos, talleres, calles, murallas y templos piramidales. Sus enormes muros están profusamente decorados con relieves de figuras geométricas, estilizaciones zoomorfas y seres mitológicos.