Por qué cualquier amante de la naturaleza debe viajar a Paracas, Perú
Los pelícanos marchan solemnemente por las playas, siempre buscando pescados abandonados por pescadores, mientras que las garzas vuelan por lo alto. Este pequeño pueblo playero está a unas cuantas horas de la capital del Perú, Lima, pero parece estar a mundos de distancia del tráfico y el ajetreo de la capital que nunca duerme. Paracas es un destino popular para turistas nacionales e internacionales. Es perfecto para un viaje de fin de semana fuera de Lima, un lugar ideal para descansar durante un viaje largo en bus a otros destinos del Perú. Paracas, en la provincia de Pasco, a 260 km al sur de la capital, es fácilmente accesible en carro o en bus.
Visita el ‘Galápagos peruano’
Encontrarás el Parque Nacional y Reserva de Paracas, así como las maravillosas Islas Ballestas. Las Islas están muy cerca a la costa y pueden ser visitadas por un viaje corto en bote desde la orilla. Es evidente por qué estas islas son llamadas ‘las Galápagos peruanas’.
Las Islas Ballestas son el hogar de muchas especies de aves y vida marina. Hay leones de mar durmiendo sobre las formaciones rocosas, coqueteando con los turistas que pasan en bote, tomándoles fotos, mientras que hay suficientes especies de aves como para que un ornitólogo grite de la emoción. Puedes encontrar aves como el ave guanera, el piquero patiazul y el tendril, entre otros. También están los pingüinos de Humboldt, así como dos variedades de focas sobre las formaciones rocosas, que se expanden alrededor de 0.12 kilómetros cuadrados.
Un viaje en bote a las islas desde el puerto de Paracas toma alrededor de dos horas, y los leones marinos usualmente se pondrán amistosos con los turistas, acercándose a los botes. El bote pasa por un inusual jeroglifo camino a las islas, parecido a los jeroglifos de Nasca. El ‘candelabro’ pertenece a la cultura Paracas, y su propósito y significado siguen siendo un misterio. Es visible si tomas un viaje en bote a las islas, y se piensa que fue un faro para las personas en el mar, pero esta es sólo una de las teorías. El llanto de los lobos de mar, haciendo eco en las islas, añaden más misterio a la historia.
Deportes de aventura en Paracas
Si te inclinas más hacia la aventura que a oservar aves, hay muchas actividades adrenalínicas a tu alcance. Disfruta del sand boarding o del subir por las empinadas dunas de arena en cuatrimoto. El oasis de la Huacachina tiene excelentes opciones para ambas actividades, pero Paracas también tiene dunas sorprendentes para que pruebes tus habilidades.
¿No te gusta la idea de tener arena en los ojos? Intenta hacer hang-gliding. Si estás buscando un subidón de adrenalina, este es el deporte perfecto para ti. Planea por encima de las dunas y el oceano por tu cuenta (¡si tienes experiencia previa!) o junto a una persona con experiencia. Otro deporte popular en el área es bucear… Y con un área tan biodiversa, ¡tendrás mucho para ver! Otros tours guiados incluyen el Museo Julio C. Tello, el centro de visitas de la reserva y, un poco más lejos, tours por Pisco (donde el famoso licor peruano es preparado), Huacachina e Ica.
Paracas solía ser un pequeño pueblo pesquero, pero la popularidad de las biodiversas Islas Ballestas y su reserva natural lo han convertido en un destino popular para la gente interesada en la historia del Perú, los deportes de aventura y la fauna del lugar.
Quedarse, comer y beber en Paracas
Hay nuevos hoteles, restaurantes y bares construidos cerca al mar —por lo que hay ofertas para todo tipo de viajero. Las opciones más baratas, claro está, se encuentran un poco lejos del mar, pero vale la pena pagar un poco más para despertar cada mañana con la vista del Océano Pacífico.
Hay una amplia variedad de comida en oferta, pero se recomienda probar platos con pescado o mariscos frescos. El ceviche (pescado marinado con zumo de limón y ají amarillo, tradicionalmente servido con cebolla morada y un poco de yuca) es típico en la región, así como la abundante sopa marina llamada parihuela.
Paracas es un hermoso lugar para visitar en cualquier momento del año y, si estás buscando aprovechar más tu viaje, puedes fácilmente visitar las líneas de Nazca y pasar por el hermoso oasis de la Huacachina. Así sea parte de un viaje más largo o el único, te aseguramos que pasarás muy buenos momentos ahí.